Ricki Hall es de ese tipo de personas que inmediatamente llaman la atención. Sus tatuajes, su corte de pelo y barba son algo que lo distingue. A pesar de que ahora hay muchos modelos con ese look, Ricki los supera a todos. En ese grupo que destaca por el vello facial, tatuajes y estilo de vida desenfrenado, su actitud lo separa de la camada.
La carrera de Ricki Hall comenzó cuando fue descubierto por un buscador de talentos, mientras trabajaba en el taller de motos de su padre. Luego de eso, firmó un contrato con una de las agencias de modelos más importantes de Londres. En la actualidad, es uno de los modelos más exitosos: Mucho trabajo editorial, una gran presencia en redes sociales y bastante influencia en el mundo de la estética masculina. Esto gracias a su peinado de inspiración retro y su barba frondosa. Hasta yo me he dejado influenciar y he inspirado mi corte de cabello en él y me he deshecho de las cuchillas de afeitar.
Una de las cosas que más me gustan del estilo de Ricki es su capacidad para cambiar: Un día podemos verlo enfundado en un traje muy elegante, como todo un caballero inglés; al día siguiente, con una camiseta básica, unos jeans rotos y su sombrero favorito. Lo de Ricki es el estilo, la actitud y los negocios, así de simple. Esto lo ha llevado a ser cara de importantes marcas, crear 3 líneas de gafas para la marca inglesa ToyShades (No me resistí y tuve que comprar dos pares, unas para ver y otras para el sol. Pueden verlas aquí y aquí.), dos colecciones para P & Co, que incluyen camisetas, accesorios de cuero y productos para el cuidado del cabello y barba, aparecer en el comercial de la línea de ropa interior de David Beckham para H&M y ser protagonista del vídeo musical de Jake Gyllenhaal.
El estilo de Hall podría definirse como una mezcla entre la estética deportiva inglesa, el estilo leñador, el dandy londinense, la escena musical de los ochenta y el look urbano estadounidense. En el armario del modelo no faltan las prendas de reconocidos diseñadores, que mezcla con prendas de segunda mano y sus Dr. Martens.
Para mí, Ricki ha sido una de las mejores cosas que le ha pasado a la moda actual. Él ha demostrado que las marcas pequeñas tienen propuestas interesantes, que la actitud juega un papel fundamental y que a pesar de que se tenga una barba y una imagen ruda, se puede ser alguien muy accesible, divertido y que se atreve a experimentar.
